Nuevamente las aguas de la bahía de Castro acogen la invernada de un Colimbo Grande, Gavia immer, es un ave de primer invierno muy desconfiada que gusta bucear en aguas del rompeolas cuando no hay gente. La primera cita fue sobre el 19/12/11 y hoy doce días después seguía buceando en el interior del puerto. Generalmente su presencia causa admiración a excepción de algunos "pescadores deportivos" que lo consideran un competidor desleal que juega con ventaja por alimentarse en su medio marino y son capaces de amenazar la integridad del ave buceadora, es una pena ser testigo de ciertas actitudes propias de sociedades culturales sin evolucionar. Esperemos que el ave no sufra daño alguno y pueda completar tranquilamente toda su invernada entre nosotros.
Bonitas fotos, Jesús. Tal y como dices esperemos que no termine como la foca que sabemos.
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